Hoy os hablo de la repercusión que el nacimiento de un nuevo hijo en el seno de una nueva familia creada puede tener en las pensiones alimenticias fijadas en un inicial procedimiento de Familia.

En estas situaciones pueden entrar en conflicto el derecho de los padres y madres a constituir una nueva familia tras la ruptura y el principio de igualdad entre los hijos.

Si bien es cierto que cualquier persona tiene el derecho de rehacer su vida y, si así lo desea, traer al mundo nuevos hijos, y tal derecho no puede ni impedirse ni limitarse por la existencia de anteriores hijos, no cabe la más mínima duda de que teniendo una persona varios hijos todos ellos tienen los mismos derechos de alimentación, vestido, educación, etc.

El nacimiento de un nuevo hijo sí que puede suponer un cambio sustancial de las circunstancias económicas, que faculta para reducir la cuantía que el padre o madre debe satisfacer en concepto de pensión de alimentos de los hijos anteriores determinada en convenio regulador.

Pues supone una notable reducción de los medios económicos disponibles de quienes están obligados a alimentarlos para hacer frente a sus necesidades.El hecho de que el nacimiento se produzca por decisión voluntaria del obligado a pasar la pensión de alimentos no implica que la obligación no pueda modificarse en beneficio de todos.

No obstante el nacimiento de un nuevo hijo, no es causa suficiente y automática para la reducción de la pensión de alimentos, lo importante para que se pueda estimarse la petición será acreditar en el procedimiento de modificación de medidas, que la nueva pareja sentimental no tiene recursos propios para el alimento del nuevo hijo. Entonces si cabria la reducción de la pensión de los anteriores puesto que los ingresos siguen siendo los mismos y hay más hijos a los que mantener.

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